La tarea del teólogo según Domingo Báñez: entre la metafísica y la mística

Abstract

Para Domingo Báñez la especulación teológica necesita de la Metafísica: ambas tienen por objeto de estudio a Dios; el conocimiento teológico de Dios supone el conocimiento metafísico. Para la Metafísica, Dios es Acto puro de ser, y la gracia es una participación de ese Acto, una intensificación del acto de ser. Pero Dios no solo es una idea abstracta, sino un ser real, con quien es posible vivir en comunión mística. La Teología se cultiva con aprovechamiento cuando el teólogo tiene connaturalidad con la realidad divina; en definitiva, el santo está en condiciones óptimas para hacer Teología. Se mantiene así la unidad entre experiencia con el Dios vivo y el ejercicio de la especulación teológica que se creía rota desde la Edad Media.

According to Domingo Báñez, theological speculation needs Metaphysics: both have God as their object of study; theological knowledge of God presupposes metaphysical knowledge. God is a pure Act of being, and the Grace is a participation in that Act, that is, an intensification of the act of being. Nevertheless, God is not only an abstract idea, but also a real being, with whom I can live intimately. Theology successfully develop when the theologian has connaturally with divine Reality; in short, the saint is in optimal situation to do Theology. The unity between experience with the living God and the work of theological speculation, which was thought to have been broken since the Middle Ages, is thus maintained.