El "Congestorium artificiose memorie" de Iohannes Host Romberch (Venetiis, 1520 y 1533): entre la escolástica y el humanismo

Abstract

A partir del título mismo del texto ("Congestorium") se ha impuesto en nuestros días la idea de que el "Congestorium artificiose memorie" de Romberch se reduce a una compleja acumulación de materiales sobre la memoria, de los que solo cabe rescatar la doctrina relativa a los "loci", y ello en buena medida porque sirve para explicar los textos de otros autores que le precedieron, como Publicius, o que, como Dolce, le siguieron en la dilatada historia del arte de la memoria. Y estos son precisamente los puntos sobre los que versará este trabajo: plantear, primero, el contexto en el que se compuso la obra; precisar, en segundo lugar, el significado real del término "Congestorium" a partir de la influencia del humanista Iohannes Reuchlin; y, en tercer lugar, plantear hasta qué punto el uso de fuentes clásicas y la autoridad reconocida de autores como Publicius, Pedro de Rávena y Reuchlin permiten atisbar cierta sensibilidad humanística en Romberch, más allá de su estrecha relación con el inquisidor de Colonia (Hoogstraten).

From the very title of the text ("Congestorium") the idea has imposed itself that Romberch’s Congestorium artificiose memorie is no more than a complex accumulation of materials about memory, from which only the doctrine concerning "loci" deserves to be rescued, to a large extent, because it serves to explain the texts of other authors who preceded him, like Publicius, and, like Dolce, those who followed him in the long history of the art of memory. And these are precisely the points with which this work will be concerned: first of all, to outline the context in which the work was composed; second, to specify the actual meaning of the term "Congestorium" from the influence of the humanist Iohannes Reuchlin; and third, to consider to what extent the use of classical sources and the recognized authority of authors such as Publicius, Petrus Ravennas and Reuchlin allow us to catch some glimpses of a humanistic sensibility in Romberch, beyond his close relationship with the inquisitor of Cologne, (Hoogstraten).