Can high schools be an effective setting to promote healthy lifestyles? Effects of a multiple behaviour change intervention in adolescents

Abstract

Propósito El objetivo principal era examinar los efectos de una intervención escolar sobre múltiples conductas de salud en adolescentes, como las conductas de movimiento de 24 horas (es decir, actividad física, tiempo de sedentarismo y duración del sueño), la dieta y el consumo de sustancias (es decir, alcohol y tabaco). Otro objetivo era examinar las diferencias intragénero en la eficacia del programa.

Métodos Se llevó a cabo un diseño cuasiexperimental en dos centros de secundaria a lo largo de un curso académico. Participó una muestra final de 210 alumnos: 105 en el centro de control (Mage = 13,07 ± 0,63) y 105 en el centro experimental (Mage = 13,05 ± 0,59). Los profesores de la escuela experimental llevaron a cabo una intervención escolar multicomponente mediante acciones curriculares (es decir, plan de acción tutorial, proyecto interdisciplinar y recreo escolar) y extracurriculares (es decir, implicación familiar, actividades institucionales y no curriculares y difusión de información y eventos sobre salud) para promover estilos de vida saludables en los adolescentes. La actividad física y el tiempo de sedentarismo se midieron mediante acelerómetros, y el resto de las conductas de salud mediante escalas autoinformadas. Resultados Los alumnos de la escuela experimental mostraron una mejora significativa en el cumplimiento de las combinaciones específicas y generales de las pautas de movimiento de 24 horas, los niveles de tiempo sedentario frente a la pantalla, la duración de la siesta, las puntuaciones de dieta (in)saludable, la ingesta de desayuno y el consumo de refrescos en comparación con los alumnos de la escuela de control y sus valores de referencia (p >0,05). Las tasas de desplazamiento activo al trabajo y de consumo de sustancias sólo mostraron una mejora significativa en comparación con los escolares de control (p >0,05). Aunque el programa de intervención fue eficaz para mejorar los comportamientos relacionados con la salud en ambos sexos, se observó un mayor tamaño del efecto en los chicos.

Conclusiones La realización de múltiples intervenciones sobre conductas saludables resulta esencial para mejorar los estilos de vida saludables de los adolescentes.

Purpose The main aim was to examine the effects of a school-based intervention on multiple health behaviors in adolescents, such as 24-hour movement behaviors (i.e., physical activity, sedentary time, and sleep duration), diet, and substance consumption (i.e., alcohol and tobacco). Another aim was to examine intragender differences in the effectiveness of the programme. Methods A quasi-experimental design was carried out in two secondary schools throughout one academic year. A final sample of 210 students participated: 105 in the control (Mage = 13.07 ± 0.63) and 105 in the experimental school (Mage = 13.05 ± 0.59). A multicomponent school-based intervention was conducted by teachers in the experimental school via curricular (i.e., tutorial action plan, interdisciplinary project, and school break) and extracurricular (i.e., family involvement, institutional and noncurricular activities, and dissemination of health information and events) actions to promote adolescents' healthy lifestyles. Physical activity and sedentary time were measured by accelerometers, and the rest of health behaviors by using self-reported scales.

Results Experimental school students showed a significant improvement in meeting specific and general combinations of 24-hour movement guidelines, sedentary screen time levels, nap duration, (un)healthy diet scores, breakfast intake, and soft drink consumption compared to both control school students and their baseline values (p >.05). Active commuting and substance consumption rates only showed a significant improvement compared to control school students (p >.05). Although the intervention programme was effective in improving health-related behaviors in both genders, a large effect size was observed in boys.

Conclusions Conducting multiple health behavior interventions becomes essential to improve adolescents' healthy lifestyles.