How does a flipped classroom course affect the affective domain toward science course?

Abstract

Teaching science in higher education has traditionally consisted of delivering knowledge as lectures to students following a teacher-centered methodology. The flipped methodology known as inverted instruction can be used as an alternative approach providing a student-centered class. This contribution presents a comparison of two different instruction methodologies, Traditional Instruction Methodology (TIM) and Inverted Instruction Methodology (IIM), in terms of students’ perceptions and emotions in a science course. The results after applying various data analytics showed that the IIM had a significant influence in students’ perceptions toward the course and made classes more interactive. Besides, the IIM had a positive impact in students’ emotions self-reported during the course. In fact, the IIM made a promotion of positive emotions toward the course, particularly when students did not have a prior science educational background. That is especially relevant since the majority of students enrolled had not taken science subjects in the previous educational levels.

La enseñanza de ciencias en la educación superior ha consistido tradicionalmente en impartir conocimientos en forma de conferencias a los estudiantes siguiendo una metodología centrada en el docente. La metodología invertida conocida como instrucción invertida se puede utilizar como un enfoque alternativo que proporciona una clase centrada en el estudiante. Esta contribución presenta una comparación de dos metodologías de instrucción diferentes, la Metodología de Instrucción Tradicional (TIM) y la Metodología de Instrucción Invertida (IIM), en términos de las percepciones y emociones de los estudiantes en un curso de ciencias. Los resultados después de aplicar varios análisis de datos mostraron que el IIM tuvo una influencia significativa en las percepciones de los estudiantes hacia el curso e hizo que las clases fueran más interactivas. Además, el IIM tuvo un impacto positivo en las emociones autoinformadas por los estudiantes durante el curso. De hecho, el IIM promovió las emociones positivas hacia el curso, particularmente cuando los estudiantes no tenían una formación previa en ciencias. Esto es especialmente relevante ya que la mayoría de los estudiantes matriculados no habían cursado materias de ciencias en los niveles educativos anteriores.